En nuestra casa encontramos la leyenda de Sant Jordi, que seguro conocéis y que es una adaptación de una narración escrita por un tal Santiago de la Vorágine durante el siglo XII, La leyenda dorada. Jorge, caballero, es el héroe de una gran gesta caballeresca; era un soldado romano nacido en la villa de Capadocia, en la actual Turquía. La tradición catalana sitúa la acción en Montblanc (Conca de Barberá). Se dice que un dragón asolaba la zona y se comía todo lo que encontraba... Psssst... Pero mejor no contaré más, ¡pues nuestra historia va por ahí!
Es original en cuanto a los títeres y los decorados, ya que se ha procurado que la estética del espectáculo sea como si los personajes salieran de un cuento infantil impreso. Los títeres son de mesa y, en ocasiones, nos pueden recordar las figuras del juego de ajedrez. Para esta versión, aunque respetamos la leyenda, la hemos vestido con mucho buen humor.